Un activista del Psuv implicado por un mensaje de texto

-Unas líneas enviadas desde Perú por WhatsApp fueron suficientes para que un oficialista de Monagas fuese involucrado en un complot para secuestrar a Diosdado Cabello

Crímenes sin castigo | 18 de abril de 2021

Conflictos

Un mensaje enviado a través de la red WhatsApp fue suficiente para que la fiscal primera provisoria de Monagas Ingris Dioselina Bermúdez solicitara ante los tribunales de control de ese estado la privación de libertad del activista Luis Eduardo Villarroel Caña, de 36 años de edad, quien de la noche a la mañana pasó de ser comisionado en la clase obrera del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) a presunto organizador de un cuerpo armado que, según el relato del Ministerio Público, pretendía secuestrar o ultimar al vicepresidente del partido de gobierno Diosdado Cabello, con la finalidad de cobrar la recompensa de diez millones de dólares, ofrecida por el gobierno estadounidense como parte del caso conocido como el Cartel de los Soles. La instrucción del expediente fue iniciada por efectivos del Grupo Antiextorsión y Secuestros de la GN en Monagas. Los militares se presentaron en la vivienda de Villarroel, en la calle principal de El Furrial, y le exigieron que entregara su celular. Encontraron dos mensajes enviados el 28 y el 29 de marzo de 2020 a través del referido sistema de mensajería, procedentes de un número registrado en Perú. De acuerdo con el acta, el remitente ya había reunido el personal y el armamento para llevar a cabo la operación. Solo faltaba determinar el sitio donde ocultarían al dirigente oficialista, una vez capturado. El último texto indicaba que ya todo estaba listo, y que solo faltaba precisar el día de la próxima visita de Cabello a su pueblo natal. Hasta el momento en que lo apresaron, Villarroel era empleado de Petróleos de Venezuela. Según el propio expediente, el hombre se sorprendió al recibir los referidos mensajes desde Perú, y le pidió consejo a un amigo, para ver si debería formular una denuncia. Pero este allegado remitió la información al comisario de la Dirección de Contrainteligencia Militar Carmelo Mayz, e inmediatamente se activaron los procedimientos para la detención de Villarroel. Las pesquisas desarrolladas a partir de entonces se limitaron a establecer nexos en las redes sociales. Seguir a un grupo que se llamara “Resistencia” era suficiente motivo para una incriminación. Y sobre la base de estos criterios, la fiscal pidió órdenes de detención contra José Luis Mujica Palencia, José Gregorio Cañas, Marisol Desenia Agreda y Desirée del Valle González, Carlos Alejandro Pérez, César Belfort Rojas, José Napoleón Vásquez, Oswald Méndez Leal, Deivis López, Jesús Heriberto Rodríguez y el exgobernador de Monagas José Gregorio Briceño. La mayoría de ellos se encuentra en el exilio

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