Juzgado de Cabo Verde descarta los alegatos de Alex Saab
-El juez relator del Tribunal Constitucional José Pina Delgado rechazó los alegatos de la defensa en torno al supuesto estatus diplomático del barranquillero, y ratificó la validez del procedimiento de su detención
Cuello blanco, El suceso del día
Especial Crímenes sin Castigo.-
El Tribunal Constitucional de Cabo Verde rechazó los argumentos centrales de la defensa de Alex Naín Saab, sobre supuestos vicios de constitucionalidad en cuanto a la detención y el proceso de extradición del empresario colombiano.
Los alegatos del juez relator, José Pina Delgado, fueron plasmados en un documento distribuido entre los magistrados, para sustentar una sentencia sobre lo debatido en la audiencia de este viernes. En concreto, se analiza si la decisión que autoriza la extradición de Saab a Estados Unidos, emitida el 16 de marzo, se ajusta a los preceptos de la carta fundamental del archipiélago.
Uno de los primeros puntos debatidos se refirió a la legalidad de la detención del empresario, efectuada el 12 de junio de 2020, con base en una orden de captura internacional que Cabo Verde no tenía documentada.
“Es lícito que las autoridades policiales penales realicen, en los términos de la ley procesal vigente, la detención de las personas que, según información oficial, en concreto de INTERPOL, son solicitadas por autoridades extranjeras competentes. No es relevante que las actas que se refieren a esta organización no hayan sido ratificadas por la República de Cabo Verde o publicadas en el ordenamiento jurídico interno caboverdiano”, argumentó el magistrado.
Otro de los argumentos esgrimidos por el equipo de abogados de Saab, encabezado por José Manuel Pinto, se refiere a una supuesta inmunidad diplomática, derivada de un nombramiento como “enviado” del gobierno de Nicolás Maduro.
Cuando fue capturado, Saab se dirigía a Teherán con el propósito de plantear la compra de gasolina y alimentos. A tal efecto, el empresario portaba cartas de Maduro y la vicepresidenta ejecutiva Delcy Rodríguez, que lo acreditaban ante el régimen de Teherán. Según documentos consignados en el expediente, el gobierno iraní también avaló este nombramiento.
Para el juzgado constitucional del archipiélago, los órganos de justicia carecen de potestad para analizar la validez de ese nombramiento. El criterio es que esa es una facultad del Poder Ejecutivo.
“Los tribunales de Cabo Verde tienen absoluta incompetencia para conocer de un asunto relacionado con la inmunidad del Derecho Internacional Público como resultado de una evaluación o posición política anterior, que lleva al reconocimiento de la condición de enviado especial solo por el Estado de Cabo Verde, sin el cual los tribunales de Cabo Verde no pueden reconocer esta cualidad”, afirmó Pino.
Otro punto debatido se refirió al acatamiento de una sentencia de la Corte de África Occidental (Cedeao), que ordenaba la inmediata liberación de Saab.
Según el magistrado relator, este mandato va contra el principio de soberanía consagrado en la carta magna de Cabo Verde. Por ende, no puede ser cumplido. Indicó además que “Cabo Verde no ha suscrito los protocolos que reconocen la competencia de la Corte de Justicia de la CEDEAO en materia de derechos humanos y no es una organización supranacional a los efectos del artículo 12 (3) de la Constitución”.
A partir de la sesión de este viernes, el juzgado compuesto por tres magistrados cuenta con siete días para anunciar un veredicto.
Saab, de 49 años de edad, fue acusado por el lavado de 350 millones de dólares, procedentes de sobornos y sobreprecios en la contratación de programas para la importación de alimentos y la construcción de viviendas, ejecutados por el gobierno de Maduro.
Aunque las penas acumuladas por todos los cargos equivaldrían a una cadena perpetua, el magistrado Pino indicó que el estado solicitante (EEUU) debe dar “garantía” de que no será aplicada una sanción de tal magnitud.
La audiencia del Tribunal Constitucional, efectuada en la isla Praia, se prolongó por menos de una hora, y fue precedida por la manifestación de un pequeño grupo de simpatizantes del extraditable.