Del poder suave a la alquimia de las 3P

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Gran impacto ha suscitado la última obra del venezolano Moisés Naím, La revancha de los poderosos (Bogotá, 2022). Y uno se pregunta sobre la razón de tanto revuelo. En fin de cuentas, este miembro del Carnegie Endowment for Internacional Peace entró en la misma línea de argumentación recorrida por el expresidente ecuatoriano Osvaldo Hurtado, autor de Dictaduras del Siglo XXI, ya comentada en este espacio, y de otros investigadores y analistas que se sustentan básicamente en la observación y la síntesis para advertirnos que la democracia es, cada día más, un bien escaso que merece todos los cuidados. De hecho, según la unidad de inteligencia de The Economist, apenas 7% de las naciones disfruta de un sistema de libertades, mientras que otro 40% lo tiene, pero con numerosas fallas. Venezuela no está en ninguno de estos dos grupos, por cierto. Ahora bien, este Naím es el mismo autor que hace nueve años nos hablaba del Fin del poder, un libro que, al margen de su lucidez retórica, ya ocasionaba enorme disonancia en los lectores venezolanos, así como los de otras latitudes que no se sentían expresados en esas páginas, en la que el poder aparece como algo esencialmente efímero, no solo para los políticos sino para todos los llamados a ejercer algún tipo de liderazgo. Naím acaso se percató de que buena parte de la población mundial quedó fuera de su primera descripción. La mayoría de los seres humanos vive regida por poderes políticos longevos, o en proceso de entronizarse más allá de lo que disponían las constituciones locales. Y es aquí donde el autor, con abundancia de hechos y referencias, descubre la alquimia que da forma a esta “revancha”: una fina mezcla de populismo, polarización y posverdad. Las 3P. Los dos primeros ingredientes de esta fórmula pueden ser encontrados en estas latitudes sin mucho esfuerzo. Y el tercero también, pero su esencia elusiva y confusa obliga a aguzar la mirada. La posverdad ya no puede ser llamada fenómeno. No es algo raro. Está por doquier. Usa a los teléfonos como vehículos para transmitir las mentiras de los líderes, envueltas en una noción según la cual no existe “una realidad independiente, susceptible de verificación”. Por ende, echa al cesto de la basura los avances de la ciencia; equipara la información decantada con las opiniones más descabelladas. Mucho de esto lo vimos en la pandemia del Covid 19. La posverdad es la amalgama que solidifica al populismo con la polarización. La revancha de los poderosos es una descripción de la realidad política que vive buena parte del mundo actual. Por ende, no es optimista. Es claro que, aún en las democracias más sólidas, la fórmula de las 3P resulta demasiado tentadora. Este libro puede ser encontrado en formato electrónico.