Exigen investigación sobre la muerte de un vigilante de la alcaldía de Caracas

El suceso del día

Rosibel González
@rosibelCGV

La última vez que Génesis Rivas hablo con su padre – Juan Francisco Rivas-, fue a las 4:00 pm del martes. A través de una llamada telefónica Rivas le pidió que le consultara su cuenta bancaria, porque debía realizar varias compras. Transcurrida la madrugada del miércoles, a Génesis Rivas la llamó una tía para decirle que su padre había muerto.
El cadáver de este hombre fue encontrado a las 9:00 pm del martes por Haydée Valdivieso, una mujer con quien se presume mantenía una relación sentimental. El hombre quedó tendido en el suelo de la sala de su residencia, ubicada en Quebrada Honda, frente a la arepera El Batacazo.
A las 12:00 am, Valdivieso se comunicó con una hermana de Rivas para darle la noticia. Minutos después, una comisión de la Policía Nacional Bolivariana se acercó al lugar, y trasladó el cadáver a la morgue del hospital José María Vargas de Caracas.
Posteriormente, la hija lo reclamó en ese centro de salud, y junto a los funcionarios de la PNB lo llevaron a la morgue de Bello Monte.
“Insistí mucho porque rechazo la versión de la mujer, quien le dijo a la policía que mi padre se había caído mientras ella estaba en el baño”, declaró.

La familia de Rivas interpuso la denuncia en la sede del Eje Central de Investigaciones de Homicidios de la policía judicial.
“Mi papá gozaba de excelente salud. No estaba sometido a ningún control médico, ni padecía de ninguna patología. Dudo que se haya muerto por una presunta caída, y nos cuestionamos – además- por qué esa mujer demoró casi dos horas para reportar el hecho”, afirmó.
La víctima trabajaba desde 2001 como vigilante en la Alcaldía de Caracas. Antes limpiaba zapatos en la calle, y de niño fue pregonero. Era padre de nueve hijos, pero solo los dos menores mantenían contacto permanente con él.
Basados en el resultado de la autopsia, los agentes determinarán si el caso amerita una investigación más profunda.