La nueva cara de los dictadores

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Los dictadores han cambiado su facha. Con la entrada del nuevo siglo, los “campos de la muerte” de la tiranía de Pol Pot parecieran cosa del pasado. Ya no reúnen a las disidencias políticas en un estadio para escoger a quién fusilarán o lanzarán desde un helicóptero. Aún así, de acuerdo con la última investigación de Sergei Guriev (profesor del Instituto de Estudios sobre Economía de París) y Daniel Treisman (profesor de ciencias políticas de la Universidad de California) las dictaduras han ganado terreno en los últimos años, hasta llegar a regir en 92 países. La ola democratizadora que surgió tras la caída del muro de Berlín llegó a su fin. No obstante, los tiranos de la actualidad ahora suelen vestir de civil, y despliegan esfuerzos para ganar popularidad en algunos sectores de las poblaciones a las que someten. Spin Dictators (Londres, 2022) es el título de esta esclarecedora obra, producto de varios años de búsqueda y sistematización de datos sobre la nueva cara de los totalitarismos. Uno de los elementos más importantes de estos gobiernos en la actualidad, explican los autores, es que sus principales figuras tienen, o alguna vez tuvieron, simpatías en amplios sectores de la población. Cuando las realidades económicas comienzan a desfavorecerlos, y merma la popularidad, acuden a la confusión. Los nuevos tiranos (esta es otra característica) nunca se hacen responsables. El origen de las calamidades siempre se encuentra en un enemigo externo o en sus opositores. Otra herramienta de uso cotidiano en los nuevos totalitarismos es la censura. Pero no aquella del hombre que llegaba a las redacciones de los diarios con un lápiz rojo. Ahora, se acude a métodos más sutiles, que tienden a opacar la crítica, dejándola reducida a pequeños círculos, mientras que los medios masivos continúan reproduciendo la narrativa oficial. Spin Dictators todavía no tiene traducción al español, pero ya puede ser adquirida en formato electrónico.