No permitirán velatorios de ultimados en la Cota 905
-Denunciaron una presunta ejecución extrajudicial en el marco de la operación Gran Cacique Guaicaipuro
El suceso del día
Especial Crímenes sin Castigo.-
La Policía Nacional Bolivariana (PNB) vigilará los procesos de entrega y custodia de los cadáveres que arrojó la operación Gran Cacique Guaicaipuro, en la Cota 905 y otras partes del país.
Desde el jueves, permanecen cerrados los accesos a la central del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf). En los alrededores se mantienen presentes funcionarios de la brigada motorizada y orden público de la PNB que deben estar atentos cuando se emita la orden de entrega de los cadáveres a sus familiares, en especial los de aquellos señalados de pertenecer a algún grupo criminal.
Algunos parientes permanecen en las afueras del organismo desde el fin de semana, por lo que suman tres días de espera con el propósito de recibir los cadáveres.
No se permitirán actos velatorios. A esto lo denominaron “entrega controlada del cuerpo”, para evitar que fuesen llevados a sus sectores populares o, que los delincuentes acudieran a las funerarias.
De acuerdo con un monitoreo periodístico, la cifra de civiles fallecidos mientras se desarrollaron los enfrentamientos asciende a trece. La noche del domingo – desde el hospital Miguel Pérez Carreño-, fue reportada la muerte del niño Alberth López, de 11 años de edad, herido el jueves por una bala perdida mientras se encontraba en su residencia, en La Cotas 905. Hasta el mediodía de este lunes, los padres no habían acudido a la medicatura forense de Bello Monte para el retiro del cuerpo.
De los 27 presuntos delincuentes ultimados hasta este lunes, uno no figura como integrante de la organización criminal al mando de alias Koki. Fue identificado como José Gregorio Vielma Clemente, de 30 años de edad, quien murió en el sector Las Quintas.
Bajo la reserva de su identidad, la madre de Vielma Clemente relató que a las 10:00 am del viernes 9 de julio, el hombre venía de El Paraíso con su esposa e hijo de 3 años de edad en sus brazos, luego de realizar unas compras, a pesar del despliegue policial que se llevaba a cabo en varias zonas de la Cota 905. Iba a su casa, en el sector Los Laureles, cuando fue abordado por los uniformados en las adyacencias a la Plaza Madariaga.
“Le quitaron el niño de los brazos, se lo dieron a la mujer y le dijeron: ahora llóralo. De allí se lo llevaron y lo mataron con una ráfaga de siete tiros, todas en el costado izquierdo. Pero antes lo golpearon, le desprendieron la nariz y un ojo. Luego lo arrastraron por un barranco”, dijo.
El lunes en la mañana hubo un tiroteo en el sector La Orquídea de Charallave. En el procedimiento – como parte del despliegue de la operación Gran Cacique Guaicaipuro- tres sujetos murieron a manos de una comisión de Cicpc. Hasta ahora no han sido identificados. Mientras que en la avenida Victoria, otros dos fueron abatidos por la policía científica y solo uno de ellos fue señalado con el alias de Silencioso.