Juez argentino solicitó a Venezuela datos sobre Emtrasur

Terrorismo

El viernes 14 de octubre, el Juzgado Federal y Correccional de Lomas de Zamora (Argentina) declaró que no existen méritos para enjuiciar, y tampoco para sobreseer, a los iraníes Gholamreza Ghasemi, Abdolbaset Mohammadi, Saeid Valizadeh y a los venezolanos Víctor Manuel Pérez y Mario José Arraga Urdaneta, únicas personas que permanecían privadas de libertad con motivo de la investigación en torno a un presunto apoyo a actividades terroristas a través del jet 747 de la estatal venezolana Emtrasur. La decisión suscrita por el juez Federico Villena también levantó la medida cautelar impuesta contra la aeronave siglas YV3531, que permanecía en suelo argentino desde el 6 de junio. Estos eran los últimos cinco integrantes de la tripulación de 19 personas, sobre los que había medidas cautelares. Los tres iraníes y los venezolanos serán impuestos formalmente de la decisión el lunes 17 de octubre. Tal parece que el caso del jet Emtrasur perdió impulso debido en parte a la ausencia de cooperación internacional, lo que impidió la confirmación sobre los señalamientos formulados desde miembros de la poderosa comunidad judía en Argentina, en cuanto a la presunta vinculación de Ghasemi con la Guardia Revolucionaria Iraní, una de las principales patrocinadoras de las actividades de Hezbollah. El auto emitido por el juez Villena abunda en datos por corroborar. Por ejemplo, se ordenó cursar a través de los canales diplomáticos una solicitud al gobierno venezolano para que explique cómo pagaron el 747, cuáles eran las condiciones en las que los iraníes supuestamente “asesoraban” a los tripulantes nacionales, así como la garantía del contrato y la forma como se produjo el traspaso de la aeronave. También se enviará una solicitud de información para que Emtrasur aporte detalles sobre todos sus vuelos, su nómina completa y las cargas que trasladaba en cada trayecto. Cuando el avión fue inspeccionado, las autoridades argentinas encontraron que tanto la papelería como las paletas utilizadas para el traslado de las cargas tenían sellos de la anterior propietaria, Queshm Fars Air. Esta línea, sancionada por el Departamento del Tesoro por su presunta vinculación con actividades terroristas, voló en quince oportunidades a Damasco, entre mayo de 2020 y enero de 2022. Luego del traspaso formal a Emtrasur, realizó otros dos vuelos a la capital de Siria. El juzgado argentino también solicitará las explicaciones correspondientes al gobierno de la República Islámica de Irán. Durante las pesquisas, fueron confiscados los teléfonos celulares de todos los tripulantes. En el dispositivo de Ghasemi encontraron fotos de Qasem Soleimani, un general iraní que comandó la Fuerza Quds hasta el 3 de enero de 2020, cuando fue ultimado en un ataque con dron. Ghasemi afirmó que conservaba las referidas gráficas puesto que Soleimani “es considerado un héroe”. El expediente está lleno de referencias a los mecanismos aplicados por el gobierno venezolano para eludir las sanciones internacionales, a través de un entramado de empresas de venezolanos, registradas en Panamá. Un elemento llamativo es que, a pesar de las referidas sanciones, invocadas con frecuencia por voceros del régimen, la línea Emtrasur carece de un oficial de cumplimiento para prevenir la legitimación de capitales.