Las maras se extienden como hormigas
Criminalidad, Libros y más...
Las maras son las pandillas más temibles y numerosas de El Salvador, Honduras y Guatemala. Se trata de estructuras criminales de reciente data. Según la historia narrada en primer lugar por Marco Lara Klahr en Hoy te toca la muerte (2006), las maras germinaron debido al reagrupamiento de individuos que habían sido deportados a esos países desde California y otros estados de la costa oeste norteamericana. En principio, ellos y sus familias habían emigrado, huyendo del conflicto civil en El Salvador y de las turbulencias de los últimos años de la Guerra Fría. Luego de ese libro pionero, las maras han sido el centro de discusiones que intentaban determinar hasta qué punto se habían desarrollado, y si representan un peligro real, más allá de los confines de sus países de origen. Hasta que en 2011 el presidente estadounidense Barack Obama incorporó a este grupo, de unos 60 mil hombres, en el listado de “amenazas” a la seguridad nacional, y posteriormente emitió una sanción a sus miembros y aliados, a través del Departamento del Tesoro. ¿Estas medidas han cambiado en algo el panorama para las maras? ¿Cuál es el estado actual de la MS-13, y de las otras agrupaciones que, aún teniendo iguales orígenes y desarrollo, intentan disputarle los espacios en toda Centroamérica? Steven Dudley nos aclara muchas de estas interrogantes en su última obra MS-13, The Making of America’s Most Notorious Gang (Canadá, 2020). Dudley es cofundador de la organización InSightCrime, y se ha desempeñado como corresponsal para medios internacionales en varios países latinoamericanos. A partir de la historia de un hombre que intentaba desvincularse de la pandilla salvadoreña (alias Norman), Dudley reconstruye la historia de la MS-13, e intenta poner en perspectiva los señalamientos sobre sus orígenes, rituales, conflictos con otros grupos y, lo más importante, las relaciones de cooperación que guardan con estructuras criminales ubicadas más al sur, y que de alguna forma facilitan su quehacer. A pesar de lo advertido alguna vez por la prensa colombiana, en el sentido de que las maras intentarían abrirse paso en el ecosistema delictivo suramericano, hasta ahora sus líderes parecieran continuar con la mira puesta en el norte. Sin embargo, la posibilidad de un conflicto abierto con el gobierno del presidente Nayib Bukele, y la creciente necesidad de armamento por los grupos suramericanos al margen de la ley -con los que las maras poseen fluidas relaciones- obligan a mantener a las maras como un importante factor de análisis del mundo criminal. Este libro puede ser adquirido en formato electrónico.